Situado en las colinas sobre la ciudad de Manjo, en la región litoral de Camerún, el MCH es un hogar para niños en situación vulnerable.
Su visión es crear un santuario donde los niños de la calle, los huérfanos y los niños necesitados puedan buscar refugio, sentirse seguros, recibir atención médica, tener acceso a educación y formación profesional así como beneficiarse de una educación cristiana.
La construcción de edificios escolares o asimismo de infraestructuras deportivas en el marco de esta asociación que dispone de un terreno de 21 hectáreas son todos proyectos en espera de realizarse. Tienen por objeto asumir la atención integral de los niños acogidos en el centro promoviendo así su éxito educativo y su desarrollo.
«Nuestra visión incluye nuestra propia escuela ya que las escuelas locales carecen de excelencia. Aunque hasta ahora nuestros alumnos estudian en las escuelas locales, la mayor parte de los progresos educativos parece realizarse después de clase, en el hogar de acogida de Manjo merced a la ayuda y a la dedicación de nuestro personal. Nos gustaría garantizar una mejor educación a nuestros alumnos y a los otros niños de la zona».
«En última instancia, nos gustaría utilizar cuatro acres para campos deportivos, incluyendo un campo de fútbol, uno de atletismo, una cancha de balonmano/voleibol, una de baloncesto y una de tenis».
La fundadora de MCH, solicitó el apoyo de Prosperi. El proyecto de MCH comenzó en 2006. Desde entonces, esta organización ha superado muchas etapas gracias a su amor por los demás y a su determinación, pero sigue necesitando apoyo para llevar a cabo proyectos que aún esperan financiación.
https://www.manjochildrenshome.org/
De la pose de la première pierre à la réalisation.
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